21 de noviembre, Santo Domingo, D.N. –La Oficina del Programa contra la Ciberdelincuencia del Consejo de Europa (C-PROC) organizó una visita de estudio con la Delegación de la Unión Europea (EUD) ante Barbados, los Estados del Caribe Oriental, la Organización de los Estados del Caribe Oriental (OECS) y CARICOM/CARIFORUM, junto con la Fundación para la Internacionalización de la Administración Pública (FIAP) y representantes de las instituciones encargadas de las políticas de ciberdelincuencia y ciberseguridad en Barbados, República Dominicana, Granada, Guyana, Jamaica, Surinam y Trinidad y Tobago. El objetivo fue compartir información y experiencias sobre respuestas eficaces frente a la ciberdelincuencia.

La reunión sirvió para presentar a los participantes las acciones globales del Consejo de Europa en materia de ciberdelincuencia, basadas en el marco del Convenio sobre la Ciberdelincuencia (Convenio de Budapest), el Comité del Convenio de Ciberdelincuencia (T-CY) y las iniciativas de fortalecimiento de capacidades lideradas por C-PROC.Las discusiones se centraron en los desafíos actuales de la ciberdelincuencia, especialmente en lo que respecta a pruebas electrónicas y el impacto de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial.

Se destacó especialmente el apoyo brindado a los países del Caribe a través de los proyectos Octopus y GLACY-e, que trabajan para armonizar la legislación local con el Convenio de Budapest y reforzar las capacidades nacionales para combatir los delitos informáticos.

La delegación expresó su interés en seguir colaborando con el Consejo de Europa para recibir apoyo especializado en la lucha contra la ciberdelincuencia, incluyendo pasos prácticos hacia la adhesión al Convenio de Budapest, que actualmente cuenta con pocos países firmantes en la región del Caribe pese a los esfuerzos regionales en materia de ciberseguridad.

Finalmente, el encuentro permitió comprender con mayor profundidad la labor del Consejo de Europa en este tema e identificar sinergias para una mayor cooperación futura entre la organización y los actores caribeños, con el objetivo de mejorar la ciberresiliencia en la región.